La problemática de los atrasos en los pagos y de la morosidad es común en pequeñas, medianas y grandes empresas.
El grado de afectación, a la tesorería y en consecuencia al normal funcionamiento económico de las mismas, es más grave en aquellas empresas de reducido tamaño y menos en las que cuentan con grado de solidez mayor.
¿Qué es un cliente moroso?
Es aquella persona natural o jurídica la cual no ha dado cumplimiento a una obligación de pago con una empresa de cualquier tipo.
Toda empresa debería tener una estrategia de cobro de impagados, pero la realidad es distinta en el caso de las Pymes.
¿Que es una estrategia de cobro?
La estrategia de cobros es un conjunto de acciones sistematizadas y reglamentadas que están dirigidas a obtener del cliente, el pago de una deuda contraída con una empresa.
¿Cómo se hace la gestión de cobro?
La gestión de recuperación de impagados debe desarrollarse, sobre todo, de forma profesional. Si una empresa pequeña o mediana no puede tener un equipo de gestión de impagados, lo mejor es contratar una empresa de cobros tipo Atlantica de Cobros.
Las empresas de cobro se dedican solo a esto, a cobrar morosos.
Un buen equipo de gestión de cobro que trabaja en equipo y debe estar bien amparado por el resto de los componentes de la empresa que contrata el servicio de cobro. Es muy importante la comunicación para facilitar la localización de los deudores y toda la información adicional que puede ser utilizada para obtener el cobro. Cuanta mayor información se tenga sobre el deudor mayores son las posibilidades de éxito que se obtendrán el cobro.
El cobrador debe ser firme, cuando se entienda el motivo del impago y la insolvencia del deudor (puede ser una insolvencia falsa), pero también debe tener dotes de negociador cuando compruebe que las posibilidades de pago de la deuda son limitadas.
Todas las gestiones deben hacerse siempre dentro del ámbito de la firmeza y la corrección, dejando bien claro el contrato entre la empresa que acudió a los servicios de la empresa de cobro de morosos, el cual no permitirá ningún tipo de actuación en la gestión contraria a la ley.